Este año tengo un compañero de trabajo que practica culturismo y charlo a menudo con él de esa actividad. Me dijo que iba a participar en la Copa de Andalucía a celebrar el 11 de octubre en el Palacio de Congresos de Cádiz y que tenía esperanzas de quedar bien; al menos había hecho los deberes, queriendo decir que se había entrenado y preparado a conciencia, tanto que ya está un poco fatigado de la temporada y necesita un descanso tras tanta preparación física y tanto rigor en la alimentación.
Le manifesté mi deseo de asistir y se alegró de que le acompañara. Quedamos en vernos allí; el espectáculo empezaría a las cuatro de la tarde.
Le digo a R. que si quiere venir y le parece estupendo. Pensé desde el principio que le gustaría, porque practica mucho gimnasio y además de pequeño en casa jugaba a imitar a los culturistas.
Comemos pronto y nos vamos. Llegamos a las cuatro menos cuarto y hay gente en la puerta porque no dejan pasar. Esperamos media hora y nos dicen que empieza con retraso. Nos sentamos y estamos esperando una hora; no, no hay mucha formalidad.
Preside el escenario un gran cartel que dice: "Culturismo y Fitness. Copa de Andalucía de WABBA". WABBA significa "World Amateur Body Building Association".
Comienza el concurso. Primero salen a escena los culturistas de la categoría de principiantes. Luego salen los de categoría junior. En diversos momento surgen incidencias, como apagarse el micrófono del locutor o dejar de sonar la música que los concursantes necesitan para las coreografías.
Finalmente son los seniors los llamados a concursar. Son sólo tres, mi compañero y dos más, uno que consiguió el año pasado el cuarto puesto en la copa de Europa y otro, que posee en Jerez un gimnasio de culturismo; éste es el más veterano y realmente asusta.
Los concursantes salen con el cuerpo todo recubierto de una crema que les da un tono muy bronceado y además sirve para que los músculos dejen ver más definidas sus líneas. Supongo que sin una crema así la luz de los focos se comería los relieves y no podrían lucir las musculaturas en su esplendor.
Diversas posiciones sirven para calibrar la musculatura de cada uno. El árbitro va pidiendo que marquen bíceps, que hagan expansión torácica, espaldas, perfil dorsal.... De vez en cuando recuerda que tienen que ir todos a la vez, para que ninguno se adelante o se retrase.
Mandan volverse de espaldas y hacer así algunos movimientos. Veo que a mi compañero lo tapan en parte, porque no se retira lo suficiente de otro concursante que, más veterano y cuco, hace lo que puede por aminorar la competencia; mi compañero se ve que es el más joven de los tres y también el más inexperto. Tendré que avisarle de que otra vez no se deje tapar.
La tabla de ejercicios ya está realizada y los mandan al fondo del escenario. Luego proceden a un emparejamiento para lo que parece un desempate.
Vuelven a pedirles diversos ejercicios. Mi compañero marca mejor los músculos pero el otro tiene una envergadura que mete miedo.
Algunos entre el público anima a uno y otros, al otro. Yo también animo.
Llega el momento de la clasificación; los tres se van al fondo. Nombran primero al que queda tercero y se adelanta a recoger el trofeo; luego, emoción, para el segundo puesto llaman a...al otro, bien. Proclaman campeón a mi compañero, con el aplauso de sus adversarios.
Una azafata le da el trofeo de campeón de la categoría senior.
Hasta aquí no ha habido premios en metálico, sólo trofeos y bolsas de productos dietéticos.
La última fase de la sesión consiste en elegir el ganador absoluto, participando los mejores de todas las categorías. Ahora sí hay premios en metálico: 1.000 euros para el primero, 600 para el segundo y 400 para el tercero.
Se repiten una vez más los ejercicios a requerimiento del árbitro: expansión torácica, perfil dorsal...
Mandan a todos al fondo del escenario y luego llaman hacia adelante a mi compañero y al otro de antes en lo que parece un posible desempate.
Ahora se ve perfectamente quién de los dos marca mejor.
Es el momento de marcar al máximo los músculos abdominales, el recto, el cuadriceps, el sartorio... Un escultor griego no tendría problemas para tomar modelos de sus esculturas.
El concurso finaliza con la exhibición libre. Cada uno hace el ejercicio que quiere.
Proclaman los ganadores de categoría absoluta. Tercero queda el ganador de los principiantes; segundo y primero son los mismos de la categoría senior. Entregan los premios en metálico y sube el presidente para fotografiarse con los tres primeros y las azafatas.
Se retiran todos del escenario y piden por los altavoces que el ganador absoluto realice, él solo y ya sin presión alguna, una exhibición triunfal. Como no hay nervios parece que le salen las cosas incluso mejor que momentos antes. Está contento y yo, también.
La próxima semana tendrá lugar la Copa de España, a celebrar en Torremolinos. El ganador de ahora queda invitado a participar; tendrá que prolongar la preparación una semana más a pesar de lo cansado que me dijo que estaba.
Al final hubo una exhibición del actual Mister Universo, el español Manuel Acosta.
Al acabar el acto muchos espectadores van a los camerinos para felicitar a los ganadores y hacerse con ellos una foto como recuerdo; otros espectadores van a los stans para comprar productos de culturismo.
R. y yo salimos y vamos a dar un paseo por Cádiz, comentando las impresiones de este espectáculo que era nuevo para los dos.
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