Está bien esto de los blogs, porque sirve de archivo personal, siempre en disposición de ir acogiendo los pensamientos que se ocurran, en cualquier momento y con posibilidad de corregir, creo, sobre la marcha. No es necesario elaborar un texto largo y sesudo de un solo golpe sino que la elaboración puede ser progresiva y adaptada a los altibajos de la inspiración. Será algo bastante cómodo, algo que pueda invitar a escribir lo que de otra forma no se escribiría. Ya me lo decía mi hijo desde hace tiempo: "pápá, tienes que escribir..."; y yo: "¿qué quieres que escriba?".
Sé que soy algo pesado para mover pero él está habituado a mover cosas pesadas.
Ya lo han podido ver moviendo un menhir...¡Ah!, ya tengo una idea para escribir: voy a hacer un post sobre ese menhir.